Conclusiones del Foro AEE Bolivia 2022

El Foro AEE Bolivia 2022, que se llevó a cabo el 14 de octubre en la ciudad de Santa Cruz (Universidad UTEPSA), concluyó con gran éxito luego de conocer las experiencias y aportes propositivos de quienes fueron los panelistas del evento.

El evento contó con la participación activa del sector eléctrico nacional, industrial, energético y académico, quienes se dieron cita para conocer de primera mano cuál es la visión que tiene cada experto sobre la transición energética que debe afrontar Bolivia. La presentación del Dr. Ramón Méndez, exsecretario de Energía de Uruguay, mostró claramente los desafíos, oportunidades y lecciones aprendidas que atravesó el país para lograr una descarbonización de su economía que es reconocida en la región como un referente. Los tres paneles planteados en el foro intentaron abarcar la mayor parte de los eslabones de la cadena de valor energética del país. Así, el panel uno sobre el incremento de la producción de hidrocarburos líquidos y soluciones de biocombustibles, a través de los panelistas invitados, mostró algunas oportunidades y soluciones que se pueden afrontar para reactivar el sector orientado a su contribución a la transición energética. El panel dos, sobre eficiencia energética y generación distribuida, mostró los beneficios para el país de aplicar estos elementos de manera efectiva. Finalmente, el panel tres reforzó la cadena de valor con tecnologías emergentes como la electromovilidad y el hidrógeno.

El foro llegó a conclusiones fascinantes que agregan valor a la estrategia de transición energética en Bolivia. Estas conclusiones se pueden resumir en los siguientes puntos:

• Es posible pasar de una matriz energética esencialmente eléctrica fósil a una híbrida con predominio de las renovables basadas en la eólica y la fotovoltaica. Los factores de éxito en Uruguay han demostrado que esto es posible bajo un gran consenso y pacto nacional entre todos los actores técnicos, sociales y políticos para establecer políticas de Estado en relación a este tema.
• Electrificar la matriz energética boliviana implica reconfigurarla mediante el mapeo de todos sus componentes primarios, secundarios y terciarios; y llevar a cabo una planificación cuidadosa, en la que el objetivo principal es la migración de servicios hacia la electrificación (caso de transporte, industria, residencial y comercial). La infraestructura de energías renovables que se desarrolle deberá estar diseñada para soportar esta electrificación de manera que no perjudique el sistema eléctrico nacional ni la operación del despacho de carga.
• Un elemento clave, quizás el más descuidado, es la educación energética que debe estar presente en todos los niveles educativos y en la sociedad en su conjunto, a través de programas de difusión y formación, con directrices claras sobre eficiencia energética, uso racional de la energía y cambio climático. Estos programas, que deben basarse en políticas energéticas en la dimensión educativa, deben impartirse en escuelas, institutos, universidades, instituciones públicas, empresas, colegios profesionales y otros grupos sociales organizados.
• Se ha propuesto importar petróleo por oleoducto desde Argentina para procesarlo en la infraestructura de refinación de Bolivia y depender menos de las importaciones de diésel.
• Desarrollar la planificación energética integral en las instancias correspondientes del Estado boliviano; también contempla a todos los actores claves en la transición energética nacional, que se establezca como una política de Estado de largo plazo hacia el año 2050 por lo menos.
• Como parte de la planificación energética integral, se deben profundizar las políticas de penetración de la electromovilidad, con programas específicos de acceso a los sectores población y transporte.
• Acelerar la transición energética hacia el cumplimiento de los compromisos asumidos a nivel internacional, como el Acuerdo de París en 2016, y que vaya en beneficio de nuestro país y ecosistema.

El Foro AEE Bolivia 2022 ha generado espacios de análisis y propuestas proactivas como aporte al desarrollo energético de nuestro país por parte de profesionales con experiencia en los diferentes ejes del desarrollo energético. Se pueden reenviar a los niveles correspondientes para ayudar con la estrategia nacional de transición energética. Nuestro principal objetivo es contribuir profesionalmente a nuestra querida Bolivia.